sábado, 13 de marzo de 2010

UNA MALA NOCHE LA TIENE CUALQUIERA

Exkissitos en Madrid
Una crónica de Freli



Freli

Cuando Paul McCartney dijo en 1966 que The Beatles terminarían siendo aceptados y escuchados como Mozart no le faltó razón. Cuando extendemos este comentario al resto de bandas de rock nos encontramos con un fenómeno asentado desde mitad de los ochenta: las bandas tributo. Estas agrupaciones tienen una similitud con la infinidad de tríos, cuartetos, quintetos y todos los tetos especializados habidos y por haber que difunden obras de compositores clásicos. Hoy en día tenemos entre nosotros infinidad de estas bandas homenaje de todo tipo de cualquier grupo de rock ya clásico o no, Zeppelín, Purple, Queen, Pistols etc. y como no, Kiss. A falta de los originales nunca está de más tener a mano a alguna banda de esta índole para que, por lo menos, nos hagan pasar un buen rato con nuestra música favorita en directo mientras socializamos con nuestros congéneres humanos y humanoides.


En el caso de los protagonistas de hoy, Exkissitos, me encuentro ante la penosa situación de escribir algo aceptable acerca de lo que en la noche del 12 de marzo de 2010 aconteció y es que lo pusieron muy difícil. Así que para no ser cruel de entrada, cargaré contra el horroroso sonido de todo el espectáculo que salía por el equipo de la sala, una sala (Heineken) donde otros conciertos suenan bien e incluso bastante bien. Las guitarras eran una maraña aguda y sin cuerpo alguno donde por mucho que se esforzase el émulo de Ace en sus solos no se distinguía nada quedando tapados y sin brillo alguno, esto sumado al bajo capado, sin chicha ni fuelle que empujase y acompañase correctamente a la batería que sobresalía sobre todos y castigó a parte del personal que acudió quizá por la curiosidad de ver en directo al que llaman el mejor tributo de Kiss de Hispania. Y aquí entramos en la parte más desagradable del asunto, las comparaciones, primeramente con el original y después, la del resto de colegas del gremio, y es que Exkissitos es un tributo bruto, y parece mentira que en ellos esté un señor con la solera de Pepe Mary, que lleva la friolera cantidad de casi más de 30 años en el rollo y se lo conoce como los trastes de su bajo o más.



¿Qué se le puede exigir a una banda de estas características? Lo que a cualquiera, hacerlo con un mínimo de rigor, por que subirse a un escenario es cosa seria aunque no sepas ni tocar y por lo menos el público valore un esfuerzo y no se sienta estafado. Para hacerlo bien no es necesario fuegos artificiales, ni el número del vomito de sangre, ni el confeti con o sin CO2, ni siquiera calcar las canciones nota a nota, es sencillamente algo de entusiasmo, con eso, lo tienes ganado y eso es lo que faltó. Algún que otro experto no fue capaz de identificar Take Me o Getaway. Is That You? e I Was Made for lovin´ You parecían tener cierto toque thrash-metal cañi con esas guitarras sin grave alguno, vale, si te quieres permitir licencias, hazlo, pero no te quedes en un mero intento sin gracia.


Sin querer compararlos con otros tributos de Kiss pero si con otras actitudes de otras bandas de este género, All Together band (The Beatles) por ejemplo, donde no solo lo clavan sino que ni siquiera hacen para que te creas que son sus maestros, su alegría y su ímpetu hace que pases un buen rato y te lleves un grato recuerdo. Una mala noche la tiene cualquiera.


Freli.